Una crisis educativa persistente

Durante las últimas dos décadas, el sistema educativo dominicano ha enfrentado serios problemas con la gestión de los libros de texto, lo que ha derivado en pérdidas millonarias y materiales que no han cumplido su función.

Además, muchos de estos libros han incluido contenidos cuestionados, lo que ha afectado la calidad de la educación. Desde el proyecto de los Textos Integrados bajo la gestión de Melanio Paredes (2008-2011) hasta los errores gramaticales y conceptuales en los libros del programa “Libro Abierto” en 2023, el país ha invertido enormes cantidades de dinero en recursos educativos inservibles.

Este artículo examina cómo estos fallos en los libros de texto han tenido consecuencias significativas tanto económicas como sociales para la República Dominicana.

Una cronología de despilfarro y errores (2005-2025)

2008-2011: Los Textos Integrados, un proyecto fallido

Durante la gestión de Melanio Paredes como secretario de Estado de Educación (luego ministro), se implementó el proyecto de los Textos Integrados, que prometía modernizar la enseñanza al combinar varias asignaturas en un solo libro.

Sin embargo, una auditoría realizada en 2012 por la Cámara de Cuentas reveló que se malgastaron RD$1,912 millones, debido a irregularidades en las licitaciones y millones de libros almacenados sin ser distribuidos.

A pesar de la gran inversión, los textos fueron criticados por su baja calidad pedagógica y por no ser aceptados por los docentes, volviéndose “inservibles”.

Estos problemas no solo afectaron la distribución de los libros, sino también la enseñanza de ciencias sociales, con errores que distorsionaron el conocimiento histórico, generando el costoso impacto de los libros en la formación de las nuevas generaciones.

2013-2015: Retiro de libros por inexactitudes históricas

En 2015, durante la gestión de Carlos Amarante Baret, el Ministerio de Educación retiró un libro de historia de sexto grado de primaria, después de ser criticado por presentar “distorsiones de la verdad” e inculcar prejuicios raciales, según lo denunciado por expertos y el ensayista Manuel Núñez.

El libro contenía errores graves sobre la historia nacional, lo que llevó a que fuera reemplazado por una nueva edición de la editorial Disesa.

Este episodio es un claro ejemplo de cómo los errores históricos en los textos afectan la identidad nacional de los estudiantes, reforzando el costoso impacto de los libros en la construcción del pensamiento crítico.

2013-2020: Almacenamiento y obsolescencia

Entre 2013 y 2020, el Ministerio de Educación acumuló más de 5 millones de libros de texto sin distribuir, con una estimación de RD$149 millones en pérdidas solo por libros retirados.

Durante este período, se criticó la gestión del MINERD, que no aprovechó adecuadamente los recursos para beneficiar a las escuelas públicas, que enfrentaban una grave escasez de materiales adecuados. En cambio, el presupuesto se centró en la nómina y en gastos que no contribuyeron directamente a mejorar la calidad educativa.

2023: Errores en el programa «Libro Abierto»

El programa “Libro Abierto”, lanzado en 2023, prometía producir 8.5 millones de libros de texto a un costo de RD$1,200 millones. Sin embargo, este proyecto también estuvo marcado por errores gramaticales, conceptuales y ortográficos.

Se detectaron fallos en libros de matemáticas, español y ciencias sociales, lo que generó críticas de la Asociación de Industrias Editoriales de la República Dominicana (Adierd).